El papel que desempeñan los ganglios linfáticos es de gran importancia. Como se ha indicado ya la red de 500 o 600 de ellos distribuidos por todo el cuerpo, que se halla diseminada por sus diferentes partes, pero se notan que hacen agrupaciones especiales en los lugares donde las extremidades se unen con el tronco. Allí sirven para detener a los microbios infecciosos que hayan penetrado por lesiones en la piel en las manos y los brazos, o los pies y las piernas, y dar tiempo a los leucocitos para que los destruyan antes de que lleguen a órganos vitales alojados en el abdomen y el tórax.
Casi todas las condiciones morbosas que afectan los nódulos linfáticos los dilatan, de modo que es fácil notar y palpar los que están situados cerca de la superficie del cuerpo. Estás dilataciones suelen ser dolorosas si se deben a inflamación o se desarrollan rápidamente. Si se producen lentamente son indoloras.
Síntomas
Un dolor de garganta o en la boca, un resfriado nasal, o una enfermedad de los oídos pueden ir acompañados de hinchazón y dolor en los ganglios situados en los lados del cuello y debajo de la mandíbula. Una infección o lesión en la mano o el brazo producen con frecuencia inflamación de los ganglios en la axila correspondiente. Las llagas del cuero cabelludo tienden a ir acompañadas de inflamación de los ganglios detrás de las orejas y en la nuca. La infección de un pie o de los órganos genitales externos suele producir inflamación de los ganglios de la ingle. Estas hinchazones disminuyen al desaparecer las condiciones que las causaron, pero mientras duran pueden requerir un tratamiento médico o quirúrgico. En varias enfermedades infecciosas agudas, como la escarlatina, la viruela, y la tifoidea, muchos nódulos linfáticos de todo el cuerpo se hinchan e inflaman. La peste bubónica deriva su nombre del hecho de que en la mayoría de los casos, los nódulos linfáticos de todo el organismo se inflaman y se forma pus en ellos. Constituyen entonces los bubones típicos. Hay una enfermedad conocida como"fiebre glandular en la cual los ganglios linfáticos, especialmente los del cuello, se hinchan y vuelven sensibles. Esta enfermedad dura solamente algún tiempo y muy rara vez resulta grave. La tuberculosis afecta con frecuencia los ganglios linfáticos del cuerpo. En la mayoría de los casos de tuberculosis de los ganglios linfáticos, son niños las personas afectas, más bien que adultos. Los ganglios tuberculosos pueden desintegrarse y formar pus. En muchos de estos casos, se ha encontrado que la enfermedad se debe al bacilo de la tuberculosis bovina y que fue transmitida al niño por leche cruda o productos lácteos provenientes de vacas tuberculosas.
Tratamientos
° Si hay dolor o sensibilidad aplíquese fomentos calientes tres veces por día.
° No consuma comida con sal.
° Tome antibióticos recetados por su medico.
° Para ayudar a sanar, tome bebidas de jengibre con miel de abejas 2 veces por día.
° Evitar generar presión en la zona del dolor.
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